Especial/Caracas
El presidente Nicolás Maduro rechazó las declaraciones de su homólogo Juan Manuel Santos desde Cúcuta y aseguró que tras el encuentro de cancilleres en Cartagena, “se había iniciado un camino”, pero ahora Santos “la embarro porque mintió”.
El jefe de Estado pidió a Santos que “proteja” el pueblo colombiano que vive en el Norte de Santander, además, enfatizó que debe prohibir la venta en su territorio de productos venezolanos “sacados en contrabando” e ilegalizar “el ataque al bolívar en Cúcuta y en Colombia”. “Hasta tanto no abriré la frontera”, advirtió.
El mandatario colombiano se mostró “indignado” desde el Norte de Santander por los testimonios de los deportados. Estas declaraciones, las ofreció Santos tras el encuentro de María Ángela Holguín y Delcy Rodríguez en Cartagena en el que se reiteró que se seguiría una línea de comunicación y cooperación entre ambas naciones.
“Le han destruido sus casas, sus pertenencias, sus documentos de identidad, los engañaban, les decían ‘váyanse para tal sitio por tal motivo’ y cuando llegaban les pedían sus papeles, les rompían las cédulas venezolanas y se los llevaban. Lo digo con toda la indignación que me produce”, expresó Juan Manuel Santos.
Ante esto, el presidente venezolano insistió que en el barrio “La Invasión”, en San Antonio, existía una “base paramilitar” y “esclavas sexuales”. Desde ahí, las autoridades venezolanos realizaron una Organización para la Liberación para el Pueblo (OLP) en la que alrededor 10 personas resultaron detenidas y cientos deportados, además se “inhabilitaron” numerosas casas.
“Nosotros lo que hicimos fue liberar (…) cuando averiguamos (descubrimos que) estaban (estas personas) ilegales, ninguno se declaró refugiado. Todos dijeron que querían regresarse, habida cuenta de que ahí no pueden vivir por ley”
