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Categoría: Sucesos
El ambulatorio fluvial fue un logro para llevar la atención primaria a los pobladores al margen del Orinoco

Especial/Ciudad Bolívar

Un viernes como hoy 5 de junio de 1987, lluvioso con vientos huracanados en todo el estado, profesores de la escuela de medicina UDO Bolívar

y funcionarios del Msas e INN, perdieron la vida de manera trágica a las 5 p.m cuando regresaban de Túmeremo luego de haber cumplido durante todo el día una faena académica, médico-asistencial en el hospital de dicha población. La nave de Rutaca YV-23C, luego de 20 minutos de vuelo fue arrollado por una turbulencia y cayó a tierra en el fundo “Las Palomas”, vía Upata-El Manteco, y localizados al día siguiente a las 11 a.m por funcionarios de defensa civil y otros organismos de rescate, hoy se cumplen 28 años de esa dolorosa tragedia.

Se trata de los doctores Edgar Gómez para la fecha era el director regional de salud, Miguel Madriz director del departamento de medicina preventiva, Mouffid Koury departamento de nefrología y Nancy López de Koury departamento de pediatría, todos brillantes docentes en Pregrado y Postgrado que dejaron huella en sus carreras y perdieron la vida en el cumplimiento de sus deberes. Además Migdalia Delgada, Yelitza Vargas y Rosario Veras, destacadas profesionales en el aérea de medicina, administración y enfermería respectivamente. Lcda. Irma Acevedo del INN y el piloto Manuel Rodríguez.

Fueron nueve los fallecidos esto constituyo una infortunada noticia de carácter nacional e internacional y conmovió a Guayana porque fueron personas entregadas con vocación a sus servicios en un país con todo un futuro en las luchas contra todas las enfermedades y de manera especial la atención medica primaría, que era el lema del doctor Edgar Gómez, jamás abandonó sus clases de pregrado y postgrado, pese a su alta responsabilidad en el estado. Sus programas de atención primaria en los barrios, caseríos a orillas del Rio Orinoco, municipios, zonas indígenas convirtieron a Guayana en referencia nacional. Gobierno e instituciones y universidad se dieron la mano para el beneficio del colectivo. Le correspondió a este médico sanitarista exponer en conferencias a nivel nacional e internacional el éxito de las mismas. Dedicó con mucho énfasis combatir el paludismo y bajar los índices de la malaria, contando con equipos de profesionales, trabajadores, fumigadores, no escatimaba esfuerzos en esa acción y recordaba al pionero Dr. Alnoldo Gabardon, a quien la UDO le confirió el Doctorado Honoris Causa, en la gestión del Dr. Oswaldo Betancour como Decano y el director regional de Salud.

UDO-Msas se dieron apoyo permanente para ejecutar proyectos en beneficio de la comunidad, población infantil, adultos y estudiantes, que recibieron medicinas, alimentos, atención bucal, oftalmológica, vacunación anti-polio, contra la fiebre amarilla, sarampión, tosferina y otras.

En cada sector urbano, rural e indígena allí estaba presente el doctor Gómez con todo su equipo, para ejecutar y poner en acción sus servicios en la escuela de medicina fue el pionero en los postgrados de salud pública y medicina familiar, brindo los recursos para los estudiantes en sus pasantías rurales Art. 8, supervisaba y realizaba los exámenes a los futuros médicos en los ambulatorios y hospitales de la región.

Este 5 de junio de 2015 al cumplirse los 28 años de las desapariciones físicas de hombre y mujeres talentosos, elevamos nuestras oraciones para que Dios los tenga en un sitial especial. De ejemplo y referencia permanente a nuevas generaciones que copien su legado, en bienestar de una nación que debe vencer sus obstáculos actuales y renacer la auténtica academia que ellos practicaron y recibieron, donde sus nombres, permanecerán en los recuerdos de quienes lo conocieron y sirvieron. Su UDO el “Alma Mater”, honor a quienes honor merecen, reza este clamor universal.