Especial/Washington El presidente de EE.UU., Barack Obama, urgió ayer a los empresarios del país a presionar al Congreso para levantar el embargo a Cuba,
al destacar las “significativas oportunidades económicas” del proceso de normalización de las relaciones bilaterales.
Durante un encuentro con empresarios en Washington en el que respondió a varias preguntas de la audiencia, Obama dijo también que la inminente visita del papa Francisco a Cuba será “una oportunidad” para ampliar las “interesantes conversaciones” que ya están produciéndose dentro de la isla.
El presidente reiteró que Cuba “no va a transformarse de la noche a la mañana” por el proceso de normalización con EE.UU., pero añadió que “inevitablemente” con el tiempo ese acercamiento “creará espacio para la libertad personal y la transición política”.
“No tiene sentido que sigamos pegados a las viejas formas de hacer negocios” con Cuba, sostuvo Obama con respecto al embargo.